viernes, 12 de octubre de 2007

El souplé más famoso

Wilfried Dietrich entró a la sala de entrenamiento de las instalaciones olímpicas en Munich seguro de encontrar a su rival de horas después. Cuando vio la enorme masa de Chris Taylor asomarse inconfundible sobre el resto de los luchadores casi corrió hacia él. Ya más cerca comenzó a preguntarle por su vida y su familia y cuando lo tuvo enfrente lo abrazó e intentó cargarlo, tal como lo harían viejos amigos que no se vieron por un tiempo. Uno de los entrenadores del equipo norteamericano observó el afán del alemán por estrechar con tanto cariño al gigante de 190 kilos y sintió que algo andaba mal. Pero no lo iba a constatar hasta unos días después.

Dietrich tenía 38 años en ese momento y una carrera impresionante en los dos estilos. Había sido campeón olímpico de lucha libre doce años antes, en Roma 1960, y allí mismo finalista en el estilo Greco Romana, algo poco habitual en la Lucha de entonces e imposible en la de ahora. Siempre cerca de los 90 kilos consiguió en total cinco medallas olímpicas (1 oro, 2 platas, 2 bronces), dos en estilo Libre y tres en Greco; y cinco mundiales (1 oro, 2 platas, 2 bronces), tres en Libre y dos en Greco. Los de Munich 1972 eran sus quintos Juegos y los únicos en los que no iba a alcanzar un lugar en el podio.

Taylor tenía 22 años y un único antecedente en el mundial de 1970, con el cuarto puesto en estilo Greco. En Munich iban a enfrentarse en los dos estilos, primero en libre, donde Taylor ganaría sin dificultades para luego llevarse el bronce (de ese combate es la primera foto), y luego en el estilo clásico, donde el alemán (que en la balanza daba apenas más de 100kg) haría lo que nadie hasta ese momento creía posible; abrazar de nuevo a la mole de casi 200 kilos pero esta vez para lanzarlo en souplé de frente y ganarle por puesta de espaldas.

“Nunca imaginé que un ser humano pudiera tirarme de la forma que lo hizo hoy Dietrich”, declaró Taylor después del combate. Y, como su entrenador, habrá recordado aquel abrazo efusivo de días antes en el que el alemán pudo medir con certeza si sus brazos llegaban a cubrir la circunferencia del americano.

4 comentarios:

Reinaldo Cedeño Pineda (EL POLEMISTA) dijo...

Me parece fabuloso este artículo, curioso y de grab conocimiento. Soy un periodista cubano, que trabajo en lka cultura pero tengo un blog de deportes:
laislaylaespina.blogspot.com

y otro de cultura

laislaylaespina.blogspot.com

Quidsiera decirle que he pouesto en mi pagina deportiva un link a la suya y que desde ahora la seguiré. Por otyro lado le pido permiso para incluir este artículo cvon sus poerespectivos creditos ne mi paginba
Feliciaddes
Reinaldo Cedeño desde Cuba

Reinaldo Cedeño Pineda (EL POLEMISTA) dijo...

perdon el blode de deporte es:

laespinadelolimpo.blogspot.com

Edison Vidales Castrillón dijo...

Excelente artículo. La foto la conocía pero nunca había visto el video.
Sigue adelante con el blog por favor.
Saludos desde Medellín.

Anónimo dijo...

Voy leyendo todos sus asrticulos con gran interes y disfrutando cada uno de ellos. Ojala usted regrese a la escritura del mismo porque somos muchos los que amamos las luchas olimpicas. un gran saludo desde Viña del Mar, Chile!
Andres Guerrero Suazo